El Instituto de Historia Natural de ese país identificó ejemplares en Kjós, una localidad ubicada al sudoeste. El registro de esta especie evidencia los efectos del calentamiento global provocado por el cambio climático, que afecta a las temperaturas de todo el planeta.
Hasta el año pasado, existían dos lugares en el planeta donde no había mosquitos: la Antártida, por su clima extremadamente frío, e Islandia, en el norte europeo. Esto se debía a que este país tiene una vegetación y unas temperaturas estacionales capaces de sustentar la vida humana y de diversos animales, incluidos algunos insectos, pero no de mosquitos.
No obstante, las variaciones ambientales han modificado las condiciones del lugar, permitiendo la aparición de estos insectos que necesitan preferentemente un clima cálido como hábitat, pero pueden desarrollarse casi en cualquier clima, excepto en el frío extremo.
Que Islandia no tuviese registro hasta ahora de la presencia de mosquitos era un dato curioso, ya que no es ni de lejos tan frío como la Antártida, donde ni los mosquitos ni las personas podrían sobrevivir mucho tiempo expuestos a sus temperaturas. También cabe destacar que países relativamente cercanos a Islandia, como Noruega, Dinamarca e incluso Groenlandia, sí tienen mosquitos.
Gísli Már Gíslason, biólogo de la Universidad de Islandia, declaró que los mosquitos no han conseguido colonizar Islandia como en otros lugares. Y la teoría más probable planteada hasta ahora es que el clima oceánico de Islandia los mantiene alejados.
Además, cuando los mosquitos ponen huevos en un clima frío, las larvas emergen con el deshielo, lo que les permite reproducirse y multiplicarse. En Islandia, sin embargo, suele haber tres grandes heladas y deshielos al año, lo que crea unas condiciones que pueden ser demasiado inestables para que el insecto sobreviva.
Pero con el calentamiento global provocado por el cambio climático, que afecta a las temperaturas de todo el planeta, hizo que esta excepción no dure mucho más tiempo.
La realidad es que el Instituto Islandés de Historia Natural confirmó el hallazgo de mosquitos Culiseta annulata que fueron recolectados en la granja Kiðafelli entre el 16 y el 18 de octubre. “Identificamos por primera vez un mosquito en Islandia”, alertaron en un informe.
“Esta especie es un mosquito de gran tamaño, ampliamente distribuido por toda Europa, incluyendo los países nórdicos y el Reino Unido. Se ha adaptado a un clima bastante frío, sobreviviendo al invierno como adulto y luego alojándose en refugios, como cobertizos y sótanos. Pica, pero no se considera peligrosa para los humanos, ya que no transmite ninguna infección conocida en estas zonas”, divulgó el instituto en el mismo comunicado.





